Pascual elevó sus ventas y redujo su deuda financiera y beneficios en 2019

Presentación del Informe de Gestión y Negocio Responsable 2019

Efeagro.- Calidad Pascual facturó 698 millones de euros en 2019, un 0,4 % más respecto a un año antes, en un ejercicio en el que redujo su deuda financiera desde los 170 millones hasta los 143 millones y recortó sus beneficios antes de impuestos (-37,17 %) y su resultado bruto de explotación (-7,14 %).

Tras la presentación del Informe de Gestión y Negocio Responsable 2019, fuentes de esta compañía han afirmado en un comunicado que "estos resultados permiten a Pascual reforzar su posición en el mercado y consolidar su apuesta por el crecimiento sostenible, con vistas al próximo plan estratégico".

Calidad Pascual, que genera el 96 % de la facturación de la matriz, Corporación Empresarial Pascual, cerró 2019 con un resultado bruto de explotación (Ebitda) de 65 millones de euros, frente a los 70 millones relativos a 2018, y un beneficio antes de impuestos (BAI) de 16,9 millones (26,9 millones en 2018).

Desde la compañía han asegurado que Pascual "sigue con paso firme la reducción de deuda financiera", que en los dos últimos años se ha recortado más de 50 millones, han hecho alusión al refuerzo de su estructura financiera gracias a un nuevo préstamo sindicado, firmado este año, de 155 millones, para "encarar su nuevo plan Estratégico".

Han detallado que se trata de un préstamo sindicado a seis años de 130 millones con una línea de ‘revolving’ de libre disposición de 25 millones, en una operación que ha estado liderada por el banco Santander y en la que también han participado Caixabank, BBVA, Bankia, Mediobanca, Cajamar, Abanca, Unicaja, Liberbank e Ibercaja.

Durante 2019, han recordado que la compañía cumplió 50 años y presentó su nueva planificación estratégica 2020/23 y su marco de gestión responsable, "tres hitos que nos han servido para abonar un terreno que con los meses se ha vuelto tremendamente inestable", en clara alusión a "la irrupción de la covid-19, que ha cambiado las reglas del juego".

"Ahora la sociedad demanda empresas que sean al mismo tiempo sólidas y con liquidez para adaptarse a sus necesidades", han añadido.

En el informe han defendido que acometen una "gestión responsable", con el propósito de aportar a la sociedad valores de "bienestar, desarrollo social y medioambiente", ofreciendo productos saludables.

Como ejemplo, el grupo se ha marcado como meta para este año reducir un 24 % los azúcares añadidos en sus batidos, un 14 % en los yogures y un 8 % en sus bebidas vegetales.

En la actualidad, Calidad Pascual cuenta con una plantilla de 2.382 empleados, el 92 % con contratos indefinidos.

Por otra parte, han resaltado su apuesta por el desarrollo social con su colaboración con el Banco de Alimentos, Cáritas, Cruz Roja, Grupo Social ONCE y Fundación A La Par, y que a través de la Fundación Tomás Pascual y Pilar Gómez-Cuétara han promovido la construcción de instalaciones de acceso a agua potable en países en vías de desarrollo.

Respecto a la economía circular, han detallado que Pascual ha reducido su huella de carbono un 7,7 % en 2019 y que tiene el objetivo de que en 2022 todas las botellas de agua Bezoya se produzcan íntegramente con este material reciclado.

Por último, han recordado que Calidad Pascual dividió la compañía su organización en dos direcciones generales "para reforzar su posición en el mercado": una de Bebidas y Distribución y otra de y Lácteos.

UCCL: “La COVID fue una "excusa" para bajar los precios de la leche en origen” “La ganadería española ha reducido su impacto medioambiental en las últimas décadas, el error ha sido no comunicarlo adecuadamente”