Calidad Pascual nombra a Víctor Córdoba como nuevo Director General de la Unidad de Lácteos
El CEO José Luis Saiz se marcha, entre otros cambios de la estructura directiva
El consejero delegado de Calidad Pascual, José Luis Saiz, ha abandonado la compañía, que tras este movimiento modifica su estructura directiva y divide su negocio en dos áreas diferenciadas: lácteos, al frente de la que se ha nombrado a Víctor Córdoba como nuevo Director General de la Unidad de Lácteos de la Compañía; y bebidas, al frente de la que se sitúa Javier Ribera, como Director General de la Unidad, quien hasta la fecha ocupaba el cargo de Director de Hostelería y Distribución Capilar de Calidad Pascual.
En el marco de este nuevo Plan Estratégico 2020-2023, Calidad Pascual pasa a tener dos grandes Unidades de Negocio diferenciadas: Lácteos, que incluye las marcas Pascual, Vivesoy y la división de Batidos; y Bebidas, con Bezoya, Bifrutas y Mocay.
La salida de Saiz fue revelada ayer en un comunicado por la propia empresa y se produce casi tres años y medio después de su aterrizaje en Pascual, donde recaló procedente de la multinacional Mondelez.
El también director general ejecutivo de la firma "ha decidido emprender un nuevo camino profesional y dejará la compañía tras más de tres años en los que ha logrado el crecimiento de los negocios; así como sentar unas sólidas bases para la consecución de nuevos retos", de acuerdo con la empresa.
Además de la marcha de Saiz, Calidad Pascual ha informado que refuerza su estructura directiva con el fichaje de Víctor Córdoba como máximo responsable de la división de lácteos.
Córdoba procede de la empresa SIG Combibloc, dedicada al sector de los envases y en la que ocupaba el cargo de director para Francia y Península Ibérica.
Sector lácteo español: “Un mercado complejo y altamente competitivo”
Desde su nuevo cargo, el ejecutivo pretende "fortalecer el liderazgo" de la marca Pascual "en un mercado complejo y altamente competitivo" en el que aspiran a "marcar la senda del sector lácteo español a través de la salud, la sostenibilidad y la innovación".
La decisión de adoptar una nueva estructura está vinculada con el plan estratégico de la firma para el período 2020-2023, cuyo objetivo es "dar continuidad a los buenos resultados del último ejercicio y seguir avanzando en una gestión sostenible y rentable".
La firma -que celebra este año su 50º aniversario- cerró 2018 con un beneficio bruto de 26,9 millones de euros y una facturación de 695 millones.
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