La formacion, esencial para la calidad de leche

Art�culo t�cnico publicado en el n� 173 (Sep-oct 2009) de la revista Frisona Espa�ola

En los �ltimos a�os hemos asistido a que grandes ganader�as cambiasen en el manejo de los animales, en la forma de alimentar a los animales y en las preparaciones de orde�o. A todo ello se ha ido adaptando el personal y hemos intentado formarlo cuando muchas veces no proven�a directamente de este sector o incluso proced�a de otros pa�ses, a lo que se le a�ad�a el problema del idioma. Tambi�n nos hemos tenido que enfrentar a una gran rotaci�n del personal que en cuanto pod�a eleg�a otras profesiones menos duras o con horarios “m�s normales”. Y otra vez tocaba ense�ar a los nuevos. Hemos intentado protocolizar todas las actuaciones posibles.

Cada vez es m�s frecuente la contrataci�n de personal extranjero en las ganader�as espa�olas. Esto ocurre tambi�n en EE.UU pero ah� la mayor�a de la mano de obra proviene de M�jico y de pa�ses de habla hispana. En nuestro pa�s se dificulta porque el n�mero de idiomas que “deber�amos” aprender supera la decena. Incluso en los que provienen de pa�ses de Am�rica del Sur, existen muchas palabras que no son exactamente las nuestras. Existen ya salas de orde�o donde los no nacidos en Espa�a son mayor�a.

Pero la formaci�n no es s�lo para los “extranjeros” sino tambi�n para el equipo local y adem�s debe ser una formaci�n continuada. Pero contratar personas procedentes de otros pa�ses y con otra cultura complica la formaci�n.

No debemos olvidar que son ellos los que realizan a diario el trabajo y por lo tanto deben por un lado entender perfectamente lo que se espera de ellos y tambi�n saber que se respeta su cultura, sus costumbres: preguntar por su pa�s, demostrar curiosidad por ello, por las ciudades m�s importantes de �l. En definitiva, que sientan que se preocupan y que se les reconoce su trabajo, intentar aprender algunas palabras en sus idiomas (hola, gracias) o incluso algo tan b�sico como conocer sus nombres (en las ganader�as grandes esto no siempre ocurre).

EL PRIMER PASO: DEJAR LAS IDEAS CLARAS A TODOS.

La idea es simple: todo el mundo debe conocer c�mo se debe trabajar, explicando y describiendo cada tarea. Y todo ello por escrito (protocolizar el trabajo). No es solamente para ser m�s eficientes y ahorrar trabajo sino realizar de forma adecuada el trabajo. Todos deben trabajar de la misma forma. Un buen protocolo es simple, f�cil de entender y directo. Son instrucciones claras, que incluso sin experiencia se puedan entender y seguir.

Una vez que se decida el tipo de protocolo a realizar en una sala de orde�o, se debe explicar a todos los orde�adores y verificar que �ste se cumple.

Primero se debe decidir c�mo se quiere trabajar en la explotaci�n para que todos orde�en de la misma forma. ¿Es preferible el orde�o territorial o secuencial? En el orde�o territorial cada orde�ador realiza todos los pasos en “su vacas” mientras que los otros orde�adores lo har�n en las suyas (ej el orde�ador se ocupa de la primera a la sexta vaca mientras que el segundo orde�ador lo hace desde la s�ptima hasta la duod�cima). En el orde�o secuencial, el priorde�ador realizar�a el primer paso de la preparaci�n del orde�o (ej aplicar el ba�o de pezones antes del orde�o) mientras que el segundo realizar�a el siguiente (ej, sacar los primeros chorros, secar y poner las pezoneras), realiz�ndolo cada uno de la primera a la �ltima vaca de la sala (ver Diagrama 1). El orde�o territorial requiere que todos los orde�adores tengan la misma formaci�n y experiencia. En el secuencial, uno puede “dirigir” el orde�o y controlar a los dem�s.

Si quieres leer el art�culo completo, puedes descargarlo desde este enlace o tambi�n desde "Documentos".

Art�culo t�cnico publicado por Mar�a Mart�n Richard en el n�mero 173 de la revista Frisona Espa�ola, correspondiente a los meses de septiembre y octubre de 2009.